Asistencia a domicilio: convivir con mayores agresivos II
Ayuda domiciliaria

Asistencia a domicilio: convivir con mayores agresivos II

19-08-2013Diego

¿Por qué el paciente con enfermedad de Alzheimer reacciona agresivamente? Convivir con mayores agresivos

El enfermo de Alzheimer reacciona de forma agresiva cuando percibe una amenaza donde no existe. Estas reacciones, aparentemente incompresibles por parte de la mayoría de los cuidadores, generan episodios difíciles de resolver y, peor aún, complicados de soportar. Y es que convivir con mayores agresivos no es fácil.

Es muy fácil que ella se enoje, porque según ella, ni tú, ni tus hijos la comprenden.

Imposibilidad de realizar una tarea, ansiedad o frustración al no comprender la situación vivida pueden ser los desencadenantes de una agresión. Generalmente las reacciones agresivas obedecen a la manera de expresar su miedo o su angustia ante algo que no es capaz de comprender.

Evidentemente, concretar y determinar sobre cuál es la causa de una determinada reacción es uno de los aspectos más desafiantes del cuidador. Casi siempre hay una causa que desencadena su reacción. Descubrirla es ser capaz de prevenir su aparición. Una vez discernidas, una buena sugerencia es anotar en una libreta cuáles son las causas que provocan su enojo, cómo reacciona cuando acontece una crisis para estar más preparado para el próximo cuadro.

No llore, ni se ponga nerviosa, ni le demuestre su miedo, tampoco la regañe por su actitud

Además estas notas le van a ser de mucha ayuda para que informe detalladamente al médico cuando la lleve a su próxima revisión. De esta manera, el médico puede determinar si es necesario darle alguna medicina especial para tratar esta conducta agresiva.

¿Qué hacer si su ser querido se pone agresivo?

  • Si su madre se pone agresiva, recuerde que es la enfermedad, no la persona, la que provoca la conducta. No se lo tome como algo personal.
  • Evite la confrontación. Nunca le argumente o le discuta.
  • Sea positivo y tenga una actitud tranquilizadora, y además hable con una voz suave y tranquila.
  • Si se pone físicamente agresivo, retroceda, pero permanezca donde pueda verle. Decirle, por ejemplo: “No me lastimes” puede ayudar.
  • Evite contener a su ser querido, como agarrarle las manos o los brazos, pero haga lo que tenga que hacer para estar a salvo.
  • Si la agresión se vuelve una preocupación, quite los objetos pesados o filosos del entorno y manténgalos fuera de la vista.
  • Avise a las personas que la cuidan, a los vecinos, amigos y familiares sobre su agresividad, para que puedan estar preparados si la situación se llega a presentar.

Si está viviendo una situación complicada con sus seres queridos y desea que le facilitemos la gestión del servicio doméstico para las familias que prefieran contratar directamente a su personal, siempre puede contactar con Domukea.

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